Supongo que decidi titular este articulo asi, porque es el titulo de una canción que siempre me hara recordar a alguien. Pero tambien es mi forma de nombrar un sentimiento o accion que se esta volviendo una necesidad. Cuando una persona como yo, que tiende a racionalizarlo todo, se deja llevar por sus sentimientos los resultados pueden ser desastrosos. He aprendido a mantener bien activos mis mecanismos de defensa y tener claro lo que en realidad quiero ¿pero qué sucede cuando alguien nos voltea la torta, cuando nos damos cuenta que esa persona representa todo eso de lo que venimos huyendo? pero que sin embargo no queremos evitar. En este momento de mi vida en que siento que todo esta donde deberia, alguien esta moviéndome el piso y haciendome notar que no soy tan duro o indiferente como pensaba. Después de pasar por varios errores amorosos, la felicidad para mi esta representada: por su sonrisa enorme, por su pelo crespo desordenado, por su caminar desgarbado y por sus ojos inocentes pero de mirada coqueta. El problema es que aunque el sentimiento fuera mutuo, que no lo es, esto no funcionaria. Cuando decides levantar una pared de protección, y a pesar de querer dejarte llevar, el muro puede ser muy alto y terminaras dandote cuenta que no puedes. Por la simple razon de que no estas dispuesto a dejar que otro gobierno tu vida. Cuando tu paraguas esta todo el tiempo abierto y siempre te has protegido de la lluvia, es muy difícil compartir el espacio, mas aun sabiendo que vas a terminar mojado y expuesto.
Al dejar entrar a esta persona en mi vida, sabia, aunque no lo aceptara, que me volveria vulnerable, que me convertiria o sacaria a la luz, al idiota que en verdad soy. Es por eso que pense que seria mas sano ser amigos, como si al tratar de convencerme a mi mismo que eso era posible lo convenceria a èl de todo lo contrario. No ha habido en mi vida una persona con la que me gustara compartir mi tiempo tanto como con él, pero a pesar de eso y sabiendo que nuestras posibilidades son limitadas decidi jugar el juego, lo que no puedo hacer es fingir que no me importa perder. Cuando uno esta interesado en alguien, no digo enamorado, porque no es el caso, al menos aun no, cualquier palabra, gesto o silencio puede ser interpretado a nuestra conveniencia y de eso se tratan mis miedos. No quiero convertime, otra vez, en como dice Emanuel: “Un idiota enamorado, que es manejado, aburrido, que se conforma” . No quiero pasarme el dia imaginando, que el esta imaginando que yo imagino, quiero saber si es cierto. La posibilidad de que nuestros puntos se encuentren en una recta es tan minima como la diferencia entra Obama y la Clinton. Asi que decidi dar un paso al costado a ver si se me pasa, pero avisando que eso sucederia. Siempre voy de frente, aunque dore la píldora. Si finalmente me estrello con otro muro, sabre que el menos lo intente, lo que no quiero es quedarme parado esperando bajo la lluvia, por alquien, que siempre he sabido, no va a venir.